Thursday, February 14, 2008

Mas Marchas

Más marchas
¿Cuál es la marcha que propone en fin de cuentas Hommes contra el narcotráfico? ¿una marcha ciudadana contra el gobierno de estados unidos?
Por Antonio Caballero
Fecha: 02/09/2008
Fueron millones las personas que marcharon en todas las ciudades del país contra las Farc. Pero insisto en lo que decía aquí mismo hace ocho días: no creo que la protesta ciudadana haga mella en las Farc. Del mismo modo, las marchas contra el secuestro (con "mejor policía del mundo" a la cabeza) que organizaba Pachito Santos cuando era periodista no hicieron mella en la industria del secuestro, ni en su aspecto político ni en su aspecto extorsivo: sólo tuvieron el resultado de llevarlo a él a la vicepresidencia de la República. Y tampoco recuerdo que hubieran servido para nada, salvo para llevar a su promotor a la Alcaldía de Bogotá y luego a la Presidencia, las marchas que no sé con qué pretexto (tal vez ni él mismo lo sepa) hacía Andresito Pastrana cuando su papá era presidente. Las marchas suelen ser completamente inocuas, en el mejor de los casos. Como las rogativas para que llueva que encabezan los curas de pueblo cuando hay sequía. Y en el peor, contraproducentes. Hace exactamente 60 años Jorge Eliécer Gaitán convocó en Bogotá una imponente "marcha del silencio" contra la violencia del gobierno, y la consecuencia fue que la violencia del gobierno creció, y de contera asesinaron a Jorge Eliécer Gaitán.

Ahora están organizando para el 6 de marzo próximo una marcha de protesta contra los crímenes de Estado. Y es tan justa como la que se hizo este lunes pasado de condena a las Farc. Pero tampoco creo que tenga efectos. Nunca llueve a gusto de todos, como dice el refrán, por muchas rogativas que se les hagan a los cielos. A las nubes. Y veo que por su parte el ex ministro Rudolf Hommes propone otra marcha más, tan obvia en su demagogia que por lo visto no se le había ocurrido a nadie. Contra el narcotráfico. Dice así el doctor Hommes en su habitual columna del diario El Tiempo:

"Hace falta que alguien también promueva una marcha contra el narcotráfico, que es lo que le da aliento económico a la guerrilla, a los paramilitares y a las demás formas de crueldad".

Y sí, claro. El narcotráfico da aliento económico a toda clase de cosas en Colombia: no sólo a la guerrilla y al paramilitarismo, sino también a las elecciones, y a la construcción, y al fútbol, y a las ferias ganaderas, y a los reinados de belleza. Da alientos hasta a la Hacienda pública, como debe saber Hommes, que ha sido ministro de Hacienda. Financia bancos, como debe saber Hommes, que ha sido asesor de bancos, y universidades, como debe saber Hommes, que también ha sido rector de universidad. Financia de todo, porque mueve muchísimo dinero. Pero si mueve muchísimo dinero es únicamente porque -como debe saber Hommes, que además de funcionario público y consultor privado ha sido profesor de una cosa llamada "teoría de la decisión" que, sea lo que sea exactamente, suena muy impresionante-, únicamente porque está prohibido, y en consecuencia es perseguido. Perseguido de todas las maneras posibles, a falta (hasta ahora) de la protesta callejera: perseguido en la selva cocalera y en la jungla bancaria, combatido con glifosato y con bala, con sentencias penales y con asesinatos. Matando o extraditando capos, capturando y condenando mulas. Atacando la oferta, atacando la demanda, atacando la producción, atacando el consumo, atacando la conexión entre los dos, que es el tráfico mismo. Todas las formas de lucha. Y ahí sigue, y ahí crece, por la sencilla razón de que se mantiene y crece en la medida en que se lo prohíbe y se lo combate: su valor agregado le viene de la guerra. Y esa guerra contraproducente es creada y mantenida únicamente -como debe saber Hommes, salvo que sea un inepto como columnista de prensa, como consultor internacional, como funcionario público, como catedrático de "teoría de la decisión"-, esa guerra contraproducente es creada y mantenida únicamente por los gobiernos de los Estados Unidos. Los cuales llevan 30 años imponiéndole al mundo todas las formas de lucha contra el narcotráfico, salvo la única que puede ser eficaz: la legalización, que acabaría con su rentabilidad descomunal y lo reduciría a las proporciones inofensivas y modestas de cualquier tráfico legal de productos de consumo, como el de la lechuga orgánica o el de la cinta aislante.

Entonces ¿cuál es la marcha que propone en fin de cuentas en su columna de prensa Rudolf Hommes? ¿Una marcha ciudadana contra el gobierno de los Estados Unidos?

No lo creo. No creo que quiera que lo asesinen, como a Jorge Eliécer Gaitán. Será más bien que quiere, como Pachito Santos, ser vicepresidente.